A veces, buscamos la felicidad en el exterior; queremos mejorar nuestra economía, nuestra posición social, tener un mejor trabajo, etc…, pero aun así no solemos quedarnos satisfechos.
Reiki nos ayuda a tener las ideas más claras y a ver las situaciones desde otro punto de vista más equilibrado y relajado,  purifica nuestro cuerpo y mente; la meditación nos vendrá muy bien, ya que también nos aporta serenidad y paz.

 

Por muy difíciles que sean las condiciones externas y las circunstancias que se nos presenten, tanto aprendiendo las técnica como recibiendo terapia de Reiki, podremos llegar a ese estado de paz que tanto necesitamos.